El PRESIDENTE DE LA ASOCIACION EN “DEBATE ABIERTO”














El pasado 21 de julio el Presidente de la Asociación, el escribano Aníbal Espinosa Viale, fue invitado al programa “DEBATE ABIERTO” conducido por Pablo González, emitido por CABLEVISION San Nicolás. Nuestro presidente expuso cuales iban a ser las actividades a desarrollar el próximo 17 de Agosto de 2010, fecha donde se conmemora el fallecimiento del General Don. José de San Martín, la mismas incluyen el acto conmemorativo en el Parque San Martín junto a autoridades gubernamentales, colegios y diversas asociaciones y agrupaciones de la ciudad, también se darán charlas en las escuelas, universidades y radios. Además el mismo expresó que es fundamental para que el país salga adelante que cada argentino conozca la obra y persona del padre de la patria quien junto a muchos patriotas de la época forjaron las bases de nuestra querida nación.

FRAY LUIS BELTRAN EL ARTILLERO DE SAN MARTIN


Si se habla de hombres virtuosos, capaces, fieles a Dios y a su Patria no se puede dejar de mencionar a la persona de Fray Luís Beltrán, a quién Mitre lo describiría como “matemático, físico y químico por intuición; artillero, pirotécnico, carpintero, arquitecto, herrero, dibujante, bordador y médico por la observación y la práctica, entendido en todas las artes manuales y lo que no sabía lo aprendía con sólo aplicar a ello sus extraordinarias facultades naturales".
Beltrán nació en la provincia de Mendoza el 7 de septiembre de 1784 según lo señalan los historiadores. ( Pero según su Testamento de ingreso a la Orden Franciscana de Santiago de Chile en el año 1800, queda asentado ante escribanos mendocinos y ante sus propios padres lo siguiente: ".. YO JOSÉ LUIS BELTRÁN NATURAL DE LA CIUDAD DE SAN JUAN  así que Fray Luis Beltrán habría nacido en territorio sanjuanino el 7 de septiembre de 1784).Sus padres Luis Bertrand, francés y Manuela Bustos, criolla Sanjuanina, lo hicieron bautizar a los tres días de su nacimiento, cuando por error le castellanizaron el apellido paterno.
A los 16 años ingresó en el Convento de San Francisco en Mendoza donde estudió las ciencias teóricas y ejercitó las prácticas como la física y la mecánica. Decidió seguir su vocación religiosa y fue trasladado a Santiago de Chile, donde en 1812 fue designado capellán de las tropas independentistas comandadas por Carrera. Las habilidades y el ingenio de Beltrán fueron puestos a prueba tras la derrota de Hierbas Buenas cuando se ofreció para recomponer el parque de artillería diezmado por los españoles. Por sus eficientes servicios fue ascendido a Teniente de Artillería, pero la derrota de los patriotas chilenos en Rancagua, el 2 de octubre de 1814, lo obligó a emprender junto a centenares de chilenos el cruce de la cordillera hacia Mendoza. En dicha ciudad se incorporó a las tropas del General San Martín, quién lo nombró teniente 2° y le confió el montaje de parque y maestranza. Beltrán impuso en el campamento del Plumerillo un frenético ritmo de producción, montó un taller en el que trabajaban por turnos unos setecientos artesanos y operarios a los que Beltrán formaba a los gritos en medio del ruido ensordecedor de los golpes del martillo sobre el hierro hasta quedar ronco para toda la vida. Allí, se fabricaba de todo, desde monturas y zapatos hasta balas de cañón, granadas, sables, fusiles, puentes colgantes y vehículos de transporte como las “zorras” (carros angosto montados sobre cuatro ruedas y tirados por mulas), inventadas por él para transportar los cañones por los senderos de la montaña.
Luego de superar el cruce de la temible cordillera y con el grado de capitán el Fray Luís demostró que no sólo fabricaba armas sino que también las usaba con gran coraje, motivo por el cual fue reconocido por el gobierno de las Provincias Unidas a través de una medalla por su actuación en la memorable batalla de Chacabuco el 12 de febrero de 1817.
Proclamada la independencia de Chile, Beltrán comenzó a preparar los pertrechos para la expedición al Perú, pero el desastre de Cancha Rayada lo obligó a trabajar sin parar, junto a un grupo selecto de colaboradores, en la provisión del ejército libertador. En sólo 16 días tuvo listos 22 cañones, cientos de fusiles y miles de municiones que serían estrenados con todo éxito en el definitivo combate de Maipú el 5 de abril de 1818. Para celebrar la Independencia de Chile recibió el encargo del Libertador de preparar los más maravillosos fuegos de artificio.
En 1822 fray Luis Beltrán fue ascendido a sargento mayor, y en 1823 se le entregaron los despachos de teniente coronel graduado. Acompañó a San Martín en la Expedición Libertadora al Perú, donde trabajó como director de maestranza hasta 1824.Tras el retiro de San Martín, Beltrán siguió peleando a los órdenes de Bolívar, instalado en el cuartel general de Trujillo.
Posteriormente se puso a las órdenes de Antonio José de Sucre y participó de la victoria definitiva de la causa americana, la batalla de Ayacucho.
En 1825 volvió a su país justo a tiempo para incorporarse, con su revalidado título de Teniente Coronel a las tropas argentinas que se aprestaban a combatir contra el Brasil. Allí desarrolló una importante labor técnica, ayudando además a proveer de armas a la escuadra del almirante Brown. Con las tropas de Alvear participó en la batalla de Ituzaingó, pero se enfermó y debió dirigirse a Buenos Aires donde renunció a la carrera militar y regresó al convento a vestir los hábitos.
Fray Luís Beltrán, aquel hombre que había armado a los brazos de la patria, imitando a grandes patriotas como Esteban de Luca y Domingo Matheu, fallecía el 8 de diciembre de 1827, en la capital de nuestro país.
Gloria máxima al Artillero de la Patria!!.